Además de provocar
llanto, olor fuerte y un sabor no siempre bienvenido, son estos compuestos la
base de un alimento altamente nutritivo, que tiene muchos usos beneficiosos
para la salud.
LA CEBOLLA CONTRA EL COLESTEROL MALO
Los componentes químicos
y minerales de la cebolla son excelentes rivales del colesterol malo. No sólo
lo combaten cuando ya está presente en el organismo, sino que también ayudan a
anular la acción de otros elementos ricos en colesterol, cuando se ingieren al
mismo tiempo.
LA CEBOLLA PARA LA DIGESTIÓN
El aparato digestivo es
otro de los grandes beneficiados con le cebolla. Comerla cruda aumenta la
secreción de jugos gástricos, contribuyendo a una mejor digestión de los
alimentos. Además, combinada con frutas ácidas neutraliza los efectos nocivos
M ácido único.
LA CEBOLLA COMO DESINTOXICANTE
Otra de sus ventajas es
la facultad de desintoxicar el organismo. Las personas quE consumen una dieta
con alto índices de toxinas encuentran en la cebolla un excelente de. purador;
y su capacidad dE ayudar al cuerpo a elimina¡ microorganismos parasitarios que
originan infecciones fintes tinales la convierten en un ex celente
desinfectante.
Si bien cruda es más
efectiv¿ como antiséptico, el caldo dE cebolla, ajo, jengibre y manzanas es
considerado uno de los mejores desintoxicantes naturales. Su virtud es la de
ayudara que el hígado se deshaga de los desechos acumulados.
LA CEBOLLA EN EL SISTEMA NERVIOSO
El
sistema nervioso también obtiene sus beneficios. Gracias a su aceite volátil,
que favorece la oxigenación de la sangre, la ingestión de cebolla junto con
lechuga tiene una fuerte acción sedante. Además, si se consume cruda, por
ejemplo en ensalada, es ideal para combatir estados de aturdimiento o
embotamiento cerebral, ya que activa la circulación sanguínea.
MINERALES Y VITAMINAS DE LA CEBOLLA
La
presencia de grandes concentraciones de vitaminas A, B y C la hacen importantísima
en la nutrición. La vitamina Aes esencial para el crecimiento y el desarrollo
del tejido epitelial, la vitamina B trabaja sobre el sistema nervioso y la
vitamina C es conocida por sus efectos contra las infecciones.
Además, la
vitamina PP ayuda a la oxigenación y es un excelente dilatador que aumenta la
energía del organismo, y la vitamina E es un buen antioxidante y tonificante.
La vitamina C convierte a
la cebolla en un potente aliado contra resfrios y otras afecciones de las vías
respiratorias. Puede ser ingerida tanto para enfermedades virósicas como de
origen asmático.
En la composición química
de la cebolla se encuentran sales fundamentales para el organismo. Además de
azufre, boro, bromo, cloro, cobre, manganeso y silicio, contiene otros minerales
de suma importancia.
El calcio, uno de los responsables de sus sorprendentes resultados
en los huesos, interviene también en la salud de los dientes y en el proceso de
coagulación de la sangre. El fósforo lo acompaña en el efecto sobre los huesos.
El hierro, fundamental
para el transporte de oxígeno y en la composición de la hemoglobina, está
presente en la cebolla evitando la anemia, con la ayuda del cobalto.