Lo que comes diariamente
juega un papel muy importante cuando se trata de disminuir el colesterol y proteger
la salud de tu corazón.
El tener el colesterol
alto puede ser el resultado de una dieta rica en grasas saturadas, colesterol y
grasas trans, el estar en sobrepeso y/o el tener la predisposición genética. Si
te diagnosticaron colesterol alto, la salud de tu corazón está en riesgo porque
se pueden tapar tus arterias. Probablemente tu médico te recomendó hacer
ejercicio y cambiar tu dieta para bajar el colesterol antes de recetarte un
medicamento.
Una buena idea para bajar
el colesterol es disminuir la cantidad de grasas saturadas y trans que
consumes. Las grasas saturadas se encuentran en las carnes rojas, entre otros
alimentos; y las grasas trans se usan para hacer galletas dulces y saladas,
pasteles o tortas. Este tipo de grasas son particularmente perjudiciales porque
elevan el llamado “colesterol malo” (LDL) y disminuyen el llamado “colesterol
bueno” (HDL). Otra buena idea es incorporar a tu dieta los alimentos que
aparecen a continuación, pues con seguridad, te ayudarán a bajar el colesterol:
Aceite de oliva: contiene una dosis elevada de antioxidantes que bajan el colesterol malo y
dejan intacto el bueno. La FDA (o sea, la Administración de Alimentos y
Medicamentos de EEUU) recomienda usar 23 gramos de aceite de oliva al día para
beneficiar al corazón. Una manera fácil de incorporarlos a tu dieta es
agregándoselo a ensaladas o para cocinar. A la hora de comprar, selecciona
siempre el “extra virgen” que es el menos procesado y conserva las cualidades
antioxidantes que sirven para bajar el nivel de colesterol.
Pescado y ácidos omega 3: varias investigaciones han demostrado los
beneficios de la grasa de los pescados que contienen ácidos omega 3 en
abundancia. Esta es buena para el corazón y para reducir el colesterol. El
salmón, el atún, las sardinas tienen un alto contenido de este ácido. Te
recomiendo que comas por lo menos dos porciones de pescado a la semana.
Avena: este delicioso alimento contiene fibra soluble, conocida por disminuir la
absorción de colesterol en el intestino. Puedes desayunar avena y a lo largo
del día, encontrar esa fibra soluble en otros alimentos como los fríjoles
pintos, las manzanas, la cebada y las ciruelas.
Nueces y almendras: famosas por ser fuente de grasas buenas, estos
alimentos también ayudan a mantener un corazón sano, pues bajan los niveles de
colesterol malo en la sangre. Además, mantienen la elasticidad de los vasos
sanguíneos. Una nota de precaución: las nueces y almendras contienen muchas
calorías, así que lo ideal es consumir dos onzas, o sea, el equivalente a tu
puño.
La Asociación Americana
del Corazón recomienda no excederse en el consumo de ninguno de estos
alimentos, pues comer de más siempre implica ganar peso. Y ganar peso,
significa poner en peligro la salud del corazón.